Resumen:
En el artículo, que a continuación se presenta, se analiza cómo desde una concepción ética del manejo de los recursos naturales, se promueve la participación activa de todos los actores sociales de las comunidades mineras, es posible lograr un tipo de desarrollo, a largo plazo, sustentable dentro de un sistema más amplio de relaciones socio – económicas donde la minería es una actividad más del tejido social. Se reflexiona sobre la posibilidad del desarrollo de una minería que respete la diversidad socio - cultural como una vía de alcanzar la sustentabilidad. Se analiza cómo el carácter hegemónico de la minería se convierte en una barrera para desarrollar proyectos socio económicos basado en la filosofía que impulsa el desarrollo sustentable. Particularmente se le presta atención a la relación que existe entre la homogeneización de la minería y de las culturas que arrasan con fuentes de vida en las regiones mineras y terminan por imponer una racionalidad socio cultural que nada tiene que ver con los saberes tradicionales donde, frecuentemente en Iberoamérica, se asientan las minas. Se valora acerca de la importancia de la elaboración de códigos de ética del minero en los países de fuerte presencia minera y la formación de profesionales de esta ciencia, partiendo de la premisa que, estos más allá de su elaboración conceptual, allí donde existe una comunidad moral se pueden convertir en un estímulo para la participación en acciones que promuevan la formación de valores ambientales.